¿Pides algo bonito, rasgados ojos de mujer que tus misterios
escondes?
¿Acaso crees, como si fuera lo divino, que mi anhelo de amor es
menor que tus sueños?
La belleza es lo que ves. Este mundo.
Lo tomas o los dejas.
Lo tomas o los dejas.
Te adentras o huyes. Arriesgas o pierdes.
Marca tus cartas durante la partida y verás, sombría el alma,
que siempre anochece.
que siempre anochece.
Me inspiras. Tu mirada sobre este lienzo desnudo es la
prueba.
Mas ¿cómo explicarte?
No provengo de la calma.
Por eso anhelo la paz de los amaneceres
y las hojas quebradas
sobre el verde del camino.
Como a ti aconteció, el corazón jugó a embestir
y fue corneado. Y en las heridas pugnan los renacimientos.
Es mi destino.
Aunque tus ruegos sean su dueño,
no soy capaz esta madrugada de profesar
no soy capaz esta madrugada de profesar
otras palabras más hermosas,
¿Quieres verlo?
¿Quieres verlo?
Sé inclinarme ante la necesidad
y alzarme como un áspid si me lastimas.
No olvides, mujer tan adiestrada,
que tu eres vida y yo semilla.
Tú el agua y yo la sangre derretida.
Mi alma no miente.
Sólo está confusa.
No te asustes, por todos los vientos.
Pues este soy yo sin muletas.
Un ser humano hecho hombre
que anhelaba tu presencia.
1 comentario:
épocas del "darse cuenta", de confesiones...,de reconocer lo que nos sucede,lo que queremos...
Mi alma no miente.
Sólo está confusa.
No te asustes, por todos los vientos.
Pues este soy yo sin muletas.
Un ser humano hecho hombre
que anhelaba tu presencia.
besos abogado!! de <3
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